Las aseguradoras y compañías de asistencia afrontan notables desafíos, desde el estrechamiento de los márgenes y el aumento en los costes de los materiales hasta la escasez de profesionales.
Después de superar un 2021 marcado por los daños que provocó la insólita borrasca Filomena, el seguro de hogar ha notado en el último año el impacto del entorno inflacionario sobre el negocio. La rentabilidad para los seguros que dan cobertura ante posibles siniestros en la vivienda y otros servicios añadidos se está viendo debilitada y, como consecuencia de ello, muchas compañías se han visto ante la necesidad de aplicar subidas de tarifas a estas coberturas para lidiar con la situación sin sacrificar calidad en el servicio al cliente.
En paralelo, tanto las aseguradoras como las compañías de asistencia alertan acerca de la falta de relevo que perciben en los profesionales del ámbito de la reparación. Este cúmulo de circunstancias dibuja un escenario desafiante para las compañías del sector, como se indicó en el encuentro Estrategias del seguro y la asistencia en hogar en un entorno inflacionario, que organizó EXPANSIÓN en colaboración con Finseguralia.
Aunque las perspectivas son complicadas, las compañías inciden en que la situación actual mejora ligeramente las previsiones que se barajaban el año pasado. En cualquier caso, "ponemos mucho foco en el coste siniestral: el precio de los materiales y de la energía nos obliga a ser más flexibles y a realizar un seguimiento periódico", explicó Esther Núñez, responsable de soluciones para el hogar de Allianz Partners. Mientras que antes solían establecerse baremos que permanecían estables, la volatilidad actual requiere una adaptación continua.
Como coincidieron los distintos expertos, el cambio de escenario macroeconómico propiciado por la guerra de Ucrania ha tenido un efecto muy contundente sobre la rentabilidad en el sector. "Las compañías ya han superado la anterior dinámica de mantener precios y defender tarifas, lo que hará que resulte más fácil para todos los players actualizar los precios y evitar las consecuencias negativas de este cambio de paradigma", recalcó Pablo Valdés, consejero delegado de Veta+.
Aunque una parte de las subidas provocadas por la inflación se ha trasladado a los precios, algunos materiales como el vidrio se han encarecido por encima del 35% en el último año. "Esto ha tenido un impacto sobre márgenes: todos, en mayor o menor medida, hemos tenido que renunciar a parte del margen", explicó Ricardo Gomar, director general de onRed, que puso en valor el carácter estable del sector. Gomar añadió que "hemos tenido que hacer un ejercicio de equilibrismo entre la estabilidad de nuestro negocio y ofrecer a las compañías la contención de costes asociada a nuestra gestión del riesgo".
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